sábado, 15 de marzo de 2014

Una célula de cada mujer.

tumblr_n289a6CMHr1r2zs3eo1_500
-Hola, Arturo.
-…
-Sí, soy yo, La Mujer. No es la primera vez que te visito, pero no te acuerdas de las veces anteriores porque estabas durmiendo, como ahora mismo. Estás soñando conmigo, sí. Y ya sabes que no me aparezco en sueños de cualquiera. Si quien me invoca sólo lo hace en plan nombrar y olvidar ni siquiera me digno mirarlo. Pero si quien me llama es alguien como tú ahora, acudo sin ningún problema.
-…
-Oh, ¿esta apariencia que tengo ahora…? Sí, bueno, es la de Candice Swanepoel, en una de sus imágenes. Es la que ha calado tanto en ti en estos momentos, con esta pose, estas formas, este tocado, este fondo y estas cortinas, que me he decidido a tomarla y dotarla de vida. Pero no te hagas ilusiones, ¿eh? Que la verdadera está en estos momentos a miles de kilómetros, como tantas otras en la mayoría de tus sueños y anhelos pasados, todas viviendo sus vidas completamente ajenas a ti. Además a mí también me gusta mucho, viene a representar con bastante exactitud mi esencia, aunque falte una de las más fundamentales, la maternidad.
-…
-Estoy aquí para complacerte otra vez. Sí, así como suena. Tu sed de mujer ha alcanzado un grado de contención tal, con esas venas y esos colores a punto de explotar, que me pongo a tu entera disposición mientras dure el sueño. Así que, dime, ¿qué deseas?
-…
-Uf, vaya, tantos estornudos seguidos es buena señal, según lo que sé de ti, pero ten cuidado, porque si despiertas me perderás… Bien, así está mejor.
-…
-¿Cómo? ¿que quieres tener el don de la palabra hablada ahora? ¿y eso porqué? ¿no te basta con que esté presente aquí y ahora?
-…
-Pasa que tengo dudas. Muchas dudas. Porque si te lo concedo, estoy segura de que te saldrá alguna metáfora tan hermosa, tan profunda y brillante, que me atarás durante mucho tiempo a ti, y eso no puede ser, ¿sabes? Que de la misma forma que aparezco, debo desaparecer. No puedo estar atada a nadie, ¿lo entiendes?
-…
-Anda, ven, déjate abandonar en mis brazos… Oh, ¿quieres empezar por mis pies? Adelante, eso me gusta… Vaya, cuánto afán y delicadeza demuestras con tus manos pese a las enormes ganas que tienes… ooh, y ahora con la boca… Lo que se están perdiendo las mujeres de tu alrededor, de verdad, pero en fin, para eso estoy yo, ésta es una de mis funciones.
-…
-¿Te gustan mis muslos? Mmm… lo que ocultan entre ellos te lo vas a tener que ganar…
-…
-Sí, leí el otro día tu idea de ponerte a disposición de cualquier mujer para complacerla, pero es muy arriesgada, desde luego. Vete a saber con qué te vas a encontrar por ahí. Menos mal que sólo fue una tentativa…
-…
-Mmm… vaya, veo que están naciendo con mucha furia unas cuantas metáforas que deseas expresar en voz alta… voy a escoger una al azar. Veamos: “Soy la esencia femenina, y mi cuerpo está formado por todas las millones de mujeres que nacen, crecen, viven, aman, se reproducen, crían, envejecen y mueren. Mi cuerpo lo componen todas ellas, cada una es una célula.” Según eso, ¿te das cuenta de que ahora mismo estás haciendo el amor a todas las mujeres del mundo…? Vaya, en torno a esta han surgido otras, simplemente por prestarle atención… Veamos: “Las rivalidades entre mujeres son cánceres. Las células cancerosas son difíciles de identificar, aislar y anular. En principio porque no se distingue desde fuera cuál es la buena y cuál la mala. Pero son veneno puro. Hay muy pocas cosas más tóxicas e insidiosas que dos o más mujeres rivales.”… Bien, basta. Estás tomando carrerilla y embalándote, y no lo voy a permitir, ya te he dicho porqué. ¿Que cómo lo voy a evitar…? Mmmm, déjame pensar… ah, ya lo tengo, así.
-…
-Exacto. Creo que lo llamáis “el trono de la reina”. Tu boca sigue trabajando, pero ya no emite más eslabones que me aten. Y el placer es parecido…
-…
-Sigue así, querido. Sigue bebiendo de mi fuente íntima. Sáciate, hombre… oh, oh, matlendes kuna, burirránba matlendes… oh, ah, aaah… mmmm… jitlacori vinaeses sazem beraarja… aaaaAAAAAH
-…
-Oh… uf… uuuuf… mmh…
-…
-Dis… discúlpame… en algún sitio… en algún sitio tenía que sujetarme, y tu… tu frente era lo más a mano que tenía para apoyarme y no caer redonda… jitla… jitlacori matlendes…
-…
-Eh, es una… una lengua muy antigua que nadie habla ya… no, no voy a decirte lo que significa, ¿vale…? lo he soltado sin querer…
-…
-Bueno, me… me voy ya. Me tengo que ir, Arturo… No te preocupes, volveré, pero ahora, me tengo que ir… buf… fretibamec… Adiós…
-…

domingo, 9 de marzo de 2014

Teatro erótico: quinta parte.

Hace algunas semanas, repasando como se repasan fotografías viejas, textos antiguos y demás, leí una pequeña obra de teatro erótico que escribí en mi otro blog, y me dije que quizá sería buena idea intentar retomar aquel espíritu chispeante, desenfadado, espontáneo e inocentón del que hacía gala ahí y que he perdido por la actual crisis y mi situación, tan diferente a la de entonces. Nunca imaginé que, con sus excelentes buenos y memorables momentos y experiencias, en general iría cuesta abajo, hasta donde estoy ahora, hundido, en el paro, desmoralizado, sin costumbres sanas que llevar a cabo cada día…

Pero bueno, este panorama tan oscuro no me ha impedido retomar ese hilo, enterrarlo en lo que es mi tierra fértil de ahora, y haya germinado en algo que el otro día soñé en estado de duerme vela. Creció con fuerza tomando forma y volumen, y hoy lo cosecho y lo plasmo por escrito en el mismo blog.

Primero incluyo las partes anteriores en orden:

Primera parte.

Segunda parte.

Segundo acto, primera parte.

Segundo acto, segunda parte.

Segundo acto, tercera parte.

Segundo acto, cuarta parte.

Y ya la más reciente, a la que me refiero con esta entrada:

Quinta parte.

Que aún no sé si es la última.

Pensaba que blog.com.es cerraría después de tanto tiempo, pero no ha sido así. Más bien ha cambiado a peor, poniendo irritantes banners de publicidad en medio del texto, pero eso yo lo evito en mi navegador gracias a una extensión que los bloquea. No sé si en el tuyo pasará lo mismo. Aún con esto, no dejes de leerlo, y si quieres decirme qué te ha parecido, te lo agradecería.

Sin título

Ah, qué tiempos aquellos… XD